¿Es posible comprender exhaustivamente a Dios?
Esta pregunta fue contestada a Allan Kardec y tuvo la sabiduría de colocarla entre los primeros aspectos en el libro de los espíritus, señalándole, quienes se identificaron como espíritus superiores, que la humanidad tiene limitaciones para profundizar la totalidad del conocimiento sobre Dios. En concreto, esto se aprecia en la respuesta a la pregunta 14 de dicho libro:
“14. ¿Dios es un ser distinto, o bien, y según opinión de algunos, es el resultante de todas las fuerzas y de todas las inteligencias del universo reunidas?
«Si así fuese. Dios no existiría; porque sería efecto y no causa, y no puede ser a la vez la una y el otro.
»Dios existe, no podéis dudarlo, y esto es lo esencial. Creedme, no paséis más allá; no os extraviéis en un laberinto del que no podríais salir. Esto no os haría mejores. sino quizá un poco más orgullosos; porque creeríais saber mucho, no sabiendo nada en realidad. Dejad, pues, a un lado todos esos sistemas, porque demasiadas cosas tenéis que más directamente os incumben, empezando por vosotros mismos. Estudiad vuestras propias imperfecciones, a fin de emanciparos de ellas, y más útil os será que querer penetrar lo impenetrable»” (Allan Kardec).
Esta respuesta no deja muchas opciones de interpretación, simplemente se señala que la verdad total de Dios es inalcanzable para la humanidad, una respuesta, por cierto, que, dada las limitaciones de la cognición humana, me parece muy sensata. Pero, además de lo anterior, otras respuestas similares se posicionaron en contra de la perspectiva panteísta de Dios. Este posicionamiento se aprecia en las respuestas a las preguntas 15 y 16 del libro de los espíritus:
“15. ¿Qué ha de pensarse de la opinión según la cual todos los cuerpos de la naturaleza, todos los seres y todos los mundos del universo son parte de la Divinidad, constituyendo en conjunto la misma Divinidad? O de otro modo, ¿qué ha de pensarse de la doctrina panteísta?
«No pudiendo el hombre hacerse Dios, quiere ser, por lo menos, una parte de Dios».
16. Los que profesan esta doctrina pretenden encontrar en ella la demostración de algunos de los atributos de Dios. Siendo infinitos los mundos, Dios es por la misma razón, infinito; no existiendo en ninguna parte el vacío o la nada. Dios está en todas partes; estando Dios en todas partes,. porque todo es parte integrante suya, da una razón de ser inteligente a todos los fenómenos de la naturaleza. ¿Qué puede oponerse a este raciocinio?
«La razón; reflexionad detenidamente, y no os será dificil reconocer el absurdo»” (Allan Kardec).
Estas respuestas rechazan la idea panteísta de que Dios está en todas partes, pero de paso también rechazan la idea panenteísta de que todo, incluso el ser humano, esté en Dios. Este posicionamiento es coherente con los atributos de Dios que le fueron señalados a Kardec, es decir, que Dios es eterno, infinito, inmutable, inmaterial, único, omnipotente, soberanamente justo y bueno:
“13. Cuando decimos que Dios es eterno, infinito, inmutable, inmaterial, único, omnipotente, soberanamente justo y bueno, ¿tenemos idea, perfecta de sus atributos?
«Desde vuestro punto de vista, si porque creéis abarcarlo todo; pero sabed que hay cosas superiores a la inteligencia del hombre más inteligente, y para las cuales carece de expresiones vuestro lenguaje, limitado a vuestras ideas y sensaciones. La razón os dice, en efecto, que Dios debe tener esas perfecciones en grado supremo; porque, si careciese de una sola de ellas, o si no las poseyese en grado infinito, no sería superior a todo, ni Dios, por lo tanto. Para ser superior a todas las cosas, Dios no ha de experimentar vicisitud alguna, ni tener ningúna de las imperfecciones que puede concebir la imaginación. »” (Allan Kardec).
En síntesis, el espiritismo aportó bastante información sobre Dios, pero advierte que no es posible que logremos la exhaustividad de las verdades de Dios. Algo claro es que Dios, como creador único del universos y los seres que lo habitan, no se reduce en ningún caso a su creación. Del mismo modo, su creación, entre ella los seres humanos, no se reduce a ser una parte Dios, sino que goza de independencia y, en basa a ella, libre albedrío. De todas maneras, en relación con dicho libre albedrío, seguirán apareciendo desarrollándose sistema que intentarán explicar exhaustivamente el conocimiento sobre Dios. Por mi parte, considero que lo más prudente es considerar como certeza los atributos de Dios y que, por lo mismo, nuestra existencia se relaciona con las leyes de Dios pero somos parte de Él.
Un abrazo a quienes se hayan interesado en esta reflexión.
Felipe Nicolás Mujica Johnson.
“14. ¿Dios es un ser distinto, o bien, y según opinión de algunos, es el resultante de todas las fuerzas y de todas las inteligencias del universo reunidas?
«Si así fuese. Dios no existiría; porque sería efecto y no causa, y no puede ser a la vez la una y el otro.
»Dios existe, no podéis dudarlo, y esto es lo esencial. Creedme, no paséis más allá; no os extraviéis en un laberinto del que no podríais salir. Esto no os haría mejores. sino quizá un poco más orgullosos; porque creeríais saber mucho, no sabiendo nada en realidad. Dejad, pues, a un lado todos esos sistemas, porque demasiadas cosas tenéis que más directamente os incumben, empezando por vosotros mismos. Estudiad vuestras propias imperfecciones, a fin de emanciparos de ellas, y más útil os será que querer penetrar lo impenetrable»” (Allan Kardec).
Esta respuesta no deja muchas opciones de interpretación, simplemente se señala que la verdad total de Dios es inalcanzable para la humanidad, una respuesta, por cierto, que, dada las limitaciones de la cognición humana, me parece muy sensata. Pero, además de lo anterior, otras respuestas similares se posicionaron en contra de la perspectiva panteísta de Dios. Este posicionamiento se aprecia en las respuestas a las preguntas 15 y 16 del libro de los espíritus:
«No pudiendo el hombre hacerse Dios, quiere ser, por lo menos, una parte de Dios».
16. Los que profesan esta doctrina pretenden encontrar en ella la demostración de algunos de los atributos de Dios. Siendo infinitos los mundos, Dios es por la misma razón, infinito; no existiendo en ninguna parte el vacío o la nada. Dios está en todas partes; estando Dios en todas partes,. porque todo es parte integrante suya, da una razón de ser inteligente a todos los fenómenos de la naturaleza. ¿Qué puede oponerse a este raciocinio?
«La razón; reflexionad detenidamente, y no os será dificil reconocer el absurdo»” (Allan Kardec).
Estas respuestas rechazan la idea panteísta de que Dios está en todas partes, pero de paso también rechazan la idea panenteísta de que todo, incluso el ser humano, esté en Dios. Este posicionamiento es coherente con los atributos de Dios que le fueron señalados a Kardec, es decir, que Dios es eterno, infinito, inmutable, inmaterial, único, omnipotente, soberanamente justo y bueno:
“13. Cuando decimos que Dios es eterno, infinito, inmutable, inmaterial, único, omnipotente, soberanamente justo y bueno, ¿tenemos idea, perfecta de sus atributos?
«Desde vuestro punto de vista, si porque creéis abarcarlo todo; pero sabed que hay cosas superiores a la inteligencia del hombre más inteligente, y para las cuales carece de expresiones vuestro lenguaje, limitado a vuestras ideas y sensaciones. La razón os dice, en efecto, que Dios debe tener esas perfecciones en grado supremo; porque, si careciese de una sola de ellas, o si no las poseyese en grado infinito, no sería superior a todo, ni Dios, por lo tanto. Para ser superior a todas las cosas, Dios no ha de experimentar vicisitud alguna, ni tener ningúna de las imperfecciones que puede concebir la imaginación. »” (Allan Kardec).
En síntesis, el espiritismo aportó bastante información sobre Dios, pero advierte que no es posible que logremos la exhaustividad de las verdades de Dios. Algo claro es que Dios, como creador único del universos y los seres que lo habitan, no se reduce en ningún caso a su creación. Del mismo modo, su creación, entre ella los seres humanos, no se reduce a ser una parte Dios, sino que goza de independencia y, en basa a ella, libre albedrío. De todas maneras, en relación con dicho libre albedrío, seguirán apareciendo desarrollándose sistema que intentarán explicar exhaustivamente el conocimiento sobre Dios. Por mi parte, considero que lo más prudente es considerar como certeza los atributos de Dios y que, por lo mismo, nuestra existencia se relaciona con las leyes de Dios pero somos parte de Él.
Un abrazo a quienes se hayan interesado en esta reflexión.
Felipe Nicolás Mujica Johnson.
DENTRO DE SU OPINIÓN COMO CONOCEDOR DE FONDO QUE DEBES SER SOBRE EL FUNDAMENTOS DE LA DOCTRINA ESPIRITA ¿CREES USTED QUE EL ESPIRITISMO TIENE RELACIÓN ALGUNA CON LA RELIGIÓN?
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